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cómo el robo de autos sigue siendo un problema sin resolver

El robo de autos sigue siendo un misterio sin resolver para las autoridades. Cada año, cientos de vehículos desaparecen sin dejar rastro, y los propietarios se quedan deseando respuestas que nunca llegan. En Santiago, donde las estadísticas han mostrado un incremento alarmante de este tipo de delitos, los ladrones parecen jugar al gato y al ratón con la policía. Uno de los métodos más comunes es el 'bumping', una técnica que consiste en forzar la cerradura del auto con una llave modificada. Las autoridades están preocupadas, pero los avances tecnológicos de los ladrones parecen ir un paso adelante.

Recientemente, un empleado de un estacionamiento comentó bajo anonimato sobre la sofisticación de las bandas organizadas. 'No son simples delincuentes. Estos tipos tienen un plan, un esquema bien armado', dijo. Las cámaras de seguridad captan imágenes difusas de los culpables, pero rara vez pueden identificarlos. Esto ha generado una ola de miedo entre los ciudadanos que, cada vez más, prefieren dejar sus autos en casa y optar por el transporte público.

Otra técnica popular entre los ladrones es el uso de dispositivos de alta tecnología que pueden interceptar la señal de la llave inteligente del auto. 'Con la llave en el bolsillo, crees que tu auto está seguro, pero estos delincuentes pueden desbloquearlo en cuestión de segundos', explicó un experto en seguridad vehicular. La sensación de vulnerabilidad se ha extendido a tal punto, que los seguros de auto han tenido que reestructurar sus políticas para abordar este problema creciente.

A pesar de los constantes esfuerzos de la policía, los índices de recuperación de autos robados siguen siendo bajos. Según el último informe del Ministerio del Interior, solo el 20% de los vehículos robados son recuperados, y muchos de ellos se encuentran en condiciones inservibles. 'Es un problema sistémico', aseguró un funcionario del gobierno. 'Tenemos que trabajar mejor en la identificación y detención de estas bandas'.

Mientras tanto, las compañías aseguradoras han comenzado a ofrecer servicios adicionales, como rastreadores GPS y alarmas avanzadas, para dar a los conductores una mayor sensación de seguridad. Sin embargo, estas soluciones también tienen sus limitaciones. Los ladrones más experimentados saben cómo desactivar estos sistemas en minutos. 'No hay una solución mágica', afirmó el director de una reconocida empresa de seguros. 'Lo que se necesita es una combinación de tecnología y políticas públicas efectivas'...

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